365 Tao #153, 30 de Noviembre 2017: Dormir
Dormir El sueño es como un tren rápido Sumergiéndose en largos túneles negros, Rebanando el día con luces rojas y negras. Sin preocuparse por el esqueleto maquinista. La cabeza a la almohada es como de cabeza a los rieles, Escuchando el retumbar del destino, Sabiendo que la apertura llegará. Al dormir, como en los túneles, Los sonidos parecen aún más cercanos . Algunos insisten en que el mundo como lo conoces deja de existir cuando duermes. El mundo existe porque algo dentro de ti afirma que es así. Cuando estás despierto, ¿ya no estás soñando entonces? ¿O sólo estás soñando otro sueño? Irse a dormir requiere soltar. Como cualquier insomne te dirá, no puede ser forzado. Pero así como identificamos el control con estar despiertos, ¿es posible que el aspecto incontrolado del dormir sea igualmente una realidad? Dormir parece tan real, y entonces despertamos. La vida despiertos parece tan real, y sin embargo necesitamos salirnos de ella todos los días. Este extraño contraste es uno que qui